Una guerra sin cuartel en Montevideo
- Adrián Gallardo
- 12 ago 2019
- 2 Min. de lectura
La pelea semiestelar del UFC Uruguay, que se llevó a cabo el último sábado, tuvo como protagonistas a Vicente Luque y Mike Perry, quienes protagonizaron una verdadera batalla en el octágono del Antel Arena, y que se llevó una verdadera ovación del público charrúa.

En los días previos a la llegada de la empresa más importante de MMA a Uruguay, se habló bastante sobre que combate era candidato a consagrarse como pelea de la noche. Y la gran mayoría de los especialistas en la materia y el público en general tenía una decisión casi unánime: el enfrentamiento que protagonizarían en peso wélter, el brasileño con raíces chilenas, Vicente Luque y el extravagante estadounidense Mike Perry.
Un duelo entre dos peleadores de estilo sumamente atractivo. Luque con un estilo de pelea con una gran cantidad de recursos: desde un Striking notable gracias al Muay Thai y el Kickboxing y un excelente Grappling. Mientras que Perry cuenta con una manera de combatir sumamente ofensiva (con las mismas influencias que Luque más algo de boxeo) y que es atrapante para los aficionados a este deporte.
Al final, estos dos peleadores, cumplieron con creces con las expectativas generadas en la previa al evento que se realizó en un Antel Arena con más de 9000 espectadores. Desde un primer momento, Luque y Perry intercambiaron potentes combinaciones, con la particularidad de que el norteamericano conectó en mayor cantidad de ocasione, pero el brasileño fue el que causó mayor daño.
El primer asalto fue relativamente favorable para Platinum, que abrió y cerró mejor el round, pero en el medio Luque tuvo algunas acciones interesantes. En el segundo, el brasileño mejoró bastante su rendimiento y superó a su rival, mientras que en el tercero, fue ampliamente superior, ya que le conectó un tremendo rodillazo en la nariz a Perry y sobre el final casi sentencia el combate con una guillotina.
El combate lo ganó Luque por decisión dividida: dos jurados los vieron ganar 29-28, mientras que el restante dio como vencedor al estadounidense por la misma cifra. Ambos peleadores recibieron una gran ovación del público presente en el majestuoso recinto montevideano, sobre todo Perry (gracias a su entrega), quien sufrió una terrible fractura en la nariz por la que debió ser intervenido quirúrgicamente (de forma exitosa). Obviamente, ambos ganaron el bono a Pelea de la Noche, por lo que recibieron US$ 50000. Efectivamente, al final este duelo terminó siendo la guerra sin cuartel que todos especularon en la previa (para la suerte de todos los pudimos presenciar este maravilloso espectáculo in situ).
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